martes, 15 de febrero de 2011

Menos política y más Libertad

Javier Benegas [Elconfidencial.com]
“Tal es la condición de la miseria humana, que el dolor es su sentimiento mas vivo”. Esta frase, de Jean le Rond d'Alembert, uno de los principales exponentes del movimiento ilustrado, viene como anillo al dedo para definir algunos rasgos fundamentales de la psique de la sociedad española. Acertada o no, diríase que los españoles estuviéramos limitados a dos sentimientos: el dolor y la rabia. Pero en nuestro caso, ese dolor es silencioso; propio de las sociedades inermes. Y nuestra rabia deviene las más de las veces en impotencia. Lo relevante no es que estos sentimientos condicionen nuestra conducta inmediata, sino que nos convierten en un torpe ejemplar de “homo sentimentalis”, impedido para razonar y, en consecuencia, aprender de la propia experiencia.

[Enlace al artículo en Elconfidencial.com]

Volviendo a la frase del principio, quizá fue precisamente a comienzos del siglo XIX que la sociedad española perdió su nexo de unión no ya con la historia europea sino con su propia evolución social. Pero ese momento de impulso que nos desvió nuevamente de nuestro camino y nos llevó, en los tiempos modernos, a una nueva sucesión de desastres nacionales, no fue el producto de la cerrazón atávica de los españoles ni de nuestras rancias instituciones o costumbres, ni siquiera fue el resultado de la abrumadora conjunción de fuerzas que desde todos los lados desgarraron el país. La responsable, paradójicamente, fue la “ilustración”, que devino, primero, en forzosa y, después, en violenta.

La Francia revolucionaria propagó por media Europa una visión moderna y liberadora, con la que se pretendía dar el definitivo portazo al Antiguo Régimen y librar a las gentes del sometimiento a las religiones y demás servidumbres. Los franceses de la revolución creían que era tan bueno y positivo todo lo que defendían y exportaban al resto de países que olvidaron respetar la libertad de aquellas sociedades a las que pretendían ilustrar para que fueran precisamente eso: libres.

En nuestro caso, su intervención degeneró en un desastre tan mayúsculo que, lejos de suponer avance alguno, España se convirtió en una tierra de desesperanza, arrasada y teñida de sangre, donde la traición, la venganza, el rencor, la envidia y el gusto adquirido por el uso de la violencia, no nos han abandonado desde entonces. El paréntesis de la Transición Democrática, amén de un enrevesado fraude, fue un espejismo. En conclusión, llevamos dos siglos instalados en el “homo sentimentalis”, inermes e impotentes frente al poder político.

Aún hoy día, nos cuesta entender que las sociedades realizan los grandes cambios con pequeños pasos por la vía de la lenta evolución de sus individuos, como si cada uno de ellos fuera un gen. Este proceso, inapreciable en tiempo real, se basa en la sabia y paciente aplicación del método de prueba y error que toda sociedad sana realiza por sí misma de forma espontánea. De esta manera, los ciudadanos, cuando son realmente libres, incorporan al acervo colectivo los principios que funcionan, mientras desechan aquellos otros que o bien no funcionan o no aportan beneficio alguno. Y lo que la Historia nos enseña -es decir, la experiencia- es que interferir en este proceso mediante la política, no resuelve los presuntos conflictos que puedan existir en la sociedad sino que los exacerba y crea nuevos problemas donde antes no los había. Por ello, lo lógico sería aprender del error y comprender que el poder político no debe ser el cuerpo expedicionario de la sociedad, y que su cometido no es planificar nuestra evolución ya que ello nos lleva a confundir política con ingeniería social. Y ésta última, en cualquiera de sus formas, es el peor enemigo de las sociedades libres.

Libertad y crisis económica

¿Pero qué entendemos los españoles por sociedades libres? Diríase que creemos en la Libertad como fin último y no como un principio fundamental que está antes que la política y las ideologías. La Libertad es para muchos de nosotros, quizá demasiados, un ideal inalcanzable propio de seres idealistas. Y para otros, un peligro. Y en ambos casos están equivocados. La Libertad es algo tangible y su acción beneficiosa es tan inmediata que es la principal fuente de riqueza. Permite que cualquier individuo, sin distinción por su raza, credo o religión, pueda probar a llevar a la práctica sus ideas, y pone al alcance de todas las personas las oportunidades, incentivando el ingenio y la iniciativa.

En una sociedad libre, el número de ciudadanos que pueden acceder a la economía y a la generación de riqueza es ilimitado, mientras que en los entornos donde falta libertad, son muy pocos los llamados a probar suerte. En consecuencia, los casos de éxito son proporcionalmente menores y la sociedad tiende a empobrecerse. La crisis económica ha puesto ante nuestros ojos esta realidad inapelable. Si miramos hacia Europa, comprobaremos que son precisamente los países con una democracia y unas instituciones de peor calidad los que se encuentran en situación más delicada. Mientras que aquellos otros cuya democracia, instituciones y mecanismos de control del poder político son más eficientes, se encuentran en mejor disposición para salir airosos del trance. ¿Es casualidad? No, en absoluto.

Para terminar, una última observación. Ahora que vamos a estar en permanente campaña electoral de aquí hasta 2012, fíjense como todos y cada uno de los candidatos que aspiran realmente a gobernar van a prometer mejor gestión, saneamiento de la economía y creación de empleo. Y frente a la apatía e indecisión del votante, apelarán una vez más al “homo sentimentalis” que hay en nosotros, azuzando los sentimientos de dolor y rabia contra el adversario. Pero ninguno de ellos va a prometer -ni siquiera a mencionar- el verdadero antídoto contra la crisis: la Libertad y la regeneración democrática con nombre y apellidos (no valen cortinas de humo como la “regeneración moral”). ¿Por qué? La respuesta a este enigma poco tiene que ver con la ideología. Afortunadamente, cada vez más ciudadanos empiezan a darse cuenta.

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18 comentarios:

  1. Don Javier, bravo. Es muy complicado decir cosas tan importantes y tan bien explicadas en un artículo. Este texto debería ser leído por todos y cada uno de los ciudadanos y haría tanto bien o más que leer el mejor de los libros.

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  2. CIENCIA ESPAÑOLA dice:
    15/02/2011 en 12:37 pm
    Magnífico, verídico, descubridor, esclarecedor, guerrero, animoso, impecable…¡RESISTENTE Y COMBATIENTE!

    http://www.votoenblanco.com/La-lucha-actual-mundial-no-es-entre-naciones-sino-entre-los-pueblos-y-sus-gobiernos_a4084.html

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  3. España, tierra natal,
    vieja nación poderosa,
    que te yergues orgullosa
    bajo tu escudo imperial.

    Tú que fuistes envidiada
    por otras muchas naciones
    y elevando tus pendones
    te viste siempre ensalzada,
    has tenido que sufrir
    que por un mal patriotismo
    te hundiesen en el abismo
    del que vas a resurgir.

    ¡Mira España cómo ondean
    nuestras airosas banderas,
    queriendo alzarse fieras
    contra los que se rebelan!

    Mira los campos inertes
    en que tus hijos murieron,
    pues ellos testigos fueron
    de tantas heroicas muertes.

    ¡Prepárate patria amada
    para volver a reinar!
    pues tus hijos te han de dar
    una corona labrada,
    con amor, honor y plata;
    los que están en los luceros,
    te dejaron ya en tus suelos
    un regio manto escarlata.
    Y con el cetro real
    empuñarás nuestro mando
    pues ya te estamos alzando
    de amor, un arco triunfal.

    ¡País de límpido cielo
    y refulgente sol!
    ¡No deshorarán tu suelo
    mientras quede un español!

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  4. Apreciados amigos.

    Este excelente artículo, relata estupendamente lo que sucede en nuestro país. Una nefasta caterva de políticos desalmados e ignorantes, se han hecho con todos los resortes del poder y quieren impedir a toda costa que los ciudadanos ejerzamos nuestro derecho de soberanía popular a controlar su gestión y sus condiciones salariales.

    Buen día a todos

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  5. Efectivamente, quitar la libertad a la sociedad es como quitar la sangre a un ser vivo. Cuanta menos sangre, menos fuerza. Por eso es necesario quitarse de encima las sanguijuelas que nos tienen anémicos.

    Vidal.

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  6. Complicado trasunto -¡Vive Dios!-, el que Vd., Sr. Benegas, plantea hoy. En su espléndido y magnífico -como siempre- artículo expone Vd. muchas, quizás demasiadas, de las más importantes y transcendentales cuestiones que, quizás, requieren, en mi modesta opinión, de mucha más amplitud para su adecuado desarrollo y entendimiento.

    Ha excitado Vd. y despertado mis sentidos y muchos de mis pensares. Y, quizás, debería yo explayar mis inquietudes y preocupaciones, pasadas, presentes y futuras, acerca del ser humano y de nuestra querida España pero me he vuelto muy escéptico y perezoso y, como creo que, lamentablemente, no tenemos remedio -ni el ser humano ni España-, prefiero dedicarme a otros menesteres más lúdicos y placenteros.

    He viajado por medio mundo y la mitad del otro medio, siempre con el "tercer ojo" bien abierto, tratando de aprender, he luchado -a mi manera- por la JUSTICIA, he leído "algunos" libros aunque mi cultura sigue siendo, por desgracia, muy limitada, he escuchado mucha música, he conocido y tratado a algunos intelectuales de "pro" que algo me han enseñado, he "mirado", extasiaso, mucho al cielo ..., analizando y meditando y, ahora, desde mi atalaya actual, siento una enorme decepción. Cada día que pasa estoy más de acuerdo con León Felipe:

    ¿Quién lee diez siglos en la Historia,
    y no la cierra?
    ¡Al ver las mismas cosas con distintas fechas!
    Los mismos hombres, las mismas guerras,
    los mismos tiranos, las mismas cadenas,
    ......

    Supongo que conoce estos versos.

    Y es que el ser humano no tenemos remedio!!! Así lo creo y, como tal, lo digo. Lo siento.

    GRacias por sus artículos. Saludos. Miguel.

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  7. Genial el artículo. Cada vez somos más los que tenemos clarísimo lo que ocurre concreta y dolorosamente, en nuestro país. Y ya vamos viendo cómo la gente empieza a despertar, poco a poco, en pequeños grupos por aquí y allá, con manifestaciones y protestas aisladas, que, repito, ¡cuánto poder tendrían si se unieran!
    Estoy participando en todos los foros, grupos, webs, que van saliendo a mi paso y que voy buscando, pero, de momento, lo único que puedo hacer es decirles a todos lo mismo, como asesora de empresas y, ahora también, dadas las circunstancias, de partidos políticos y/o similares:
    Nuestra crisis no es solo económica, sino que es una crisis de mentalidad y hasta que no rompamos las cadenas que nos atan al pasado y a los heredados e inútiles atavismos, no cambiará nada.
    Cada grupo, con la mejor intención, se lanza en pos de su objetivo y consigue atraer a unos miles que, huyendo de lo que no les gusta o buscando algo que les guste más, se apuntan a tal o cual grupo, ideología o consigna. Sin investigar ni darse cuenta que, -cuestión de matices y/o lenguaje- en el fondo el objetivo o ideal es el mismo.
    Cada grupo se convierte pues en una piedrecita, que va creando un camino de gravilla suelta dirigiéndose lentamente hacia un mismo objetivo superior que nadie ha visto todavía. Porque cuando uno se conforma con ser gravilla, por mucho brillo que quiera dar a su piedrecita, no dejará de ser eso, una piedrecita, en ese camino que pretende llegar a hundir un edificio secular, que alberga y sostiene a todos aquellos que están muy cómodos allí y van a hacer lo necesario para que nada cambie.
    Y en algún momento, una piedrecita por aquí, otra por allá, se lanzarán contra el tejado de ese edificio, el cual ni siquiera se enterará, por muy fuerte que sea la granizada que le caiga encima. Porque el edificio es fuerte y está muy bien pertrechado contra tormentas similares que ya conoce y no le importan lo más mínimo, ya que no suponen ningún peligro.
    Lo único que podemos y debemos hacer es unir TODAS las piedrecitas del país, para formar una montaña tan grande y sólida que, al atacar el edificio, sea igual o más grande y potente que él mismo y no pueda resistir la catapulta -por lo demás, inesperada- que se le va a venir encima.

    Si al PSOE le votaron 10 millones, al PP parece que le van a votar otros tantos, total serían 20, y quitando los que no pueden votar, ¿cuántos millones quedan en el país para construir la montaña que pueda contra todos ellos versus los más de 45 millones que somos?

    ¡Ahora tenemos esa oportunidad histórica! Todo español consciente tiene la responsabilidad de luchar por su país, por la justicia, por la igualdad, por el bienestar real y por el futuro de las siguientes generaciones.
    Pero para ello, es imprescindible:
    - conocer y contactar con todos y cada uno de los grupos que existan. Todos están en Internet.
    - organización y coordinación única, tras hacerles ver las ventajas de la Unión Para La Acción. (Mi lema).
    - trabajo en equipo, a través de Liderazgo, donde cada uno hace lo mejor que sabe hacer.
    - eliminar el "ego" o individualismo (importancia personal) para subir al siguiente nivel de excelencia grupal, del que todos saldrán beneficiados.
    Y esto requiere, como ya dije, mentalidad empresarial. Ese es mi campo.
    Amigos, yo no tengo ningún interés personal de "gobernar" ni mandar ni nada por el estilo. No es esa mi etopeya ni mi leit motif en la vida.
    Pero sí reúno unos metaprogramas personales y experiencia profesional que me hacen la persona idónea para ayudar a que esta idea se pueda conseguir. Y seguro que hay muchos más, porque uno por sí solo no puede hacer nada, ya que hacen falta muchas cabezas, manos y piés, pero todos, como un ciempiés gigante, unidos por un mismo afán, un mismo objetivo y en una misma dirección. Y os aseguro que eso es IMPARABLE.

    El momento es AHORA, así que quien esté dispuesto a pensar en grande y hacer algo bien orquestado, que me avise. La unión hace la fuerza. Fuerza es lo que nos sobra. Unión es lo que nos falta.

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  8. Marta, me gusta tu poesía y quiero ponerla en mi Facebook. Dime si eres la autora, con nombre, etc. o el que corresponda en su caso.
    Gracias.

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  9. Al igual que Imma comparto que tu poesia es realmente muy bonita de alto contenido literario.

    Saludos a todos !!

    Juan - Hoteles Cabo San Lucas

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  10. Por mucho que nos neguemos a aceptarlo, la realidad es que el hombre es un ser limitado y por lo tanto falible, y además el mundo es imperfecto.
    El rumbo que tomó la modernidad, refleja el tozudo rechazo de estas evidencias inescapables, y dos siglos de experimentos sobre nuestra supuesta naturaleza han terminado por pervertir lo que se inició como un intento lógico de ampliar nuestra autonomía. El hombre puede ser libre, pero define esta libertad dentro de las esferas que le son propias, entre ellas la política.
    Dejando de lado otros problemas compartidos con el resto de Occidente, llama la atención, como dice el sr Benegas, la situación de países como el nuestro. Nuestro panorama político se asemeja más al resultado de un apresurado e hipócrita afán de imitación superficial, que a la evolución natural y consciente de una sociedad libre.
    Los humanos somos como somos, incluyendo a los políticos; y eso, aquí, en China o en Nueva Zelanda. Por lo tanto si en España asistimos a un fracaso, la explicación debe hallarse en otro motivo que no sea únicamente, la clamorosa ausencia de virtudes de nuestros políticos. Ellos no son sólo una causa, también son un efecto del error.
    Si esto no funciona es por que las reglas del juego ignoran la verdad del ser humano, y por lo tanto no proporcionan mecanismos eficaces para prevenir y tratar nuestros defectos.Y mientras sigamos con esa actitud autocomplaciente, maniquea e inútil, de enredarnos en los accidentes (que si unos trajes aquí o que si unas hípicas allá), permaneceremos ajenos al análisis inteligente de las causas y a la reflexión traquila sobre las soluciones. Y lo único que nos quedará será seguir apegados a nuestros sentimientos, a la espera de otra etapa de bonanza económica, que oculte las miserias de nuestro sistema bajo la espesa alfombra de la abundancia.

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  11. Para muchos, la libertad sigue siendo el socialismo. Incluso después de enormes genocidios, desmanes humanitarios, corrupción a destajo y recorte de libertades, el progre sigue pensando que la sociedad libre es la que reparte la pobreza entre todos.

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  12. Permitidme, amigos míos, discrepar en el fondo, con respecto a la opinión sobre los humanos. Los humanos de los que hablamos en general no somos así por el hecho de ser humanos, sino por el hecho de haber sido programados mal: para el fracaso, para la mediocridad, para la involución, para tener un ego en lugar de autoestima, para mirar hacia afuera en vez de hacia dentro, es decir: somos el resultado de lo que yo llamo el "Proceso de Educastración occidental". (Ver mi libro "Retorno al Paraíso. El Despertar").

    El espíritu humano es perfecto y vive en un universo perfecto, lleno de infinitas posibilidades... de las cuales sólo escoge las que le han dicho los demás que tiene que escoger, y se comporta como los demás le dijeron que tenía que hacerlo, y cuando trata de salir de esa carcel mental en la que su alma se siente infeliz y atrapada, mira a su alrededor y lo que ve tampoco le sirve de ejemplo, desgraciadamente. Y entonces baja la cabeza. Se autodestruye. O se yergue y toma el mando, y entonces se convierte en un líder, hasta que alguien se lo carga porque no interesa. Y esa es nuestra historia.

    Para ello, la sociedad se inventa excusas como que la perfección no existe, que lo perfecto es enemigo de lo bueno, que nadie es perfecto, y la autocompasión, la envidia, el victimismo, y otras estupideces semejantes que un animal nunca utilizaría.
    Si somos una raza de éxito, a pesar nuestro, y los más inteligentes de este planeta o al menos eso parece, -aunque los hechos demuestren todo lo contrario-, lo primero que tenemos que hacer es exámen de conciencia y empezar a darnos cuenta que, precisamente, esa forma de pensar sobre nosotros mismos, es lo que nos ha llevado a donde estamos.

    La mente humana no tiene límites. Nuestro cerebro es perfecto (hardware), del que como mucho usamos un 10% y con una programación nefasta (software), pero como el conocimiento da poder, se ha tratado por todos los medios de mantener al pueblo ignorante, miedoso, sometido, manipulado, y ese y no otro es el origen del resultado. No es el ser humano: es la programación establecida, las estrategias de distracción y baja educación, vicios autorizados, libertinaje y potenciación de la parte animal de las personas (vMeme beige en la Dinámica Espiral) que es lo más involutivo que existe. De ahí todo lo que se ha hecho en este país para mantener alejado al pueblo de lo que realmente importa.
    Pero eso es manipulación, chantaje emocional e ignorancia programada. Pero os recuerdo una cosa, amigos: NINGUN SER HUMANO NACE PROGRAMADO. Cuando tienes un bebé, no te dice el médico: "mire, ha tenido usted un imbécil, o un vago, o una depresiva, o un político...", luego todo eso es cambiable, reaprendible, sustituible por algo mucho mejor, más cercano a la auténtica esencia del espíritu, no del ego.

    Todo esto que os digo es la auténtica realidad espiritual que se ha perdido, oculta tras las religiones: el poder interior, la divinidad y unicidad intrínseca, la perfección de estar hechos a imagen y semejanza de un Dios Cósmico, (no religioso, por favor) del cual precisamente las religiones nos han apartado para quitarnos nuestro poder.
    Si esa conciencia vuelve al pueblo, os aseguro que las cosas cambiarán a la velocidad de la luz.
    ¡Se admiten apuestas!

    Llevo muchos años enseñándolo y comprobándolo. Y no soy yo sola. Somos muchos más en el planeta. No todo está perdido: tened fe en vosotros mismos y el resto os seguirá.

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  13. Hola.
    Yo también tengo una "poesía española", aunque ésta no es del género épico, ni una Oda, ni siquiera unas seguirillas.
    Son unos ripios "callejeros" que se me ocurrieron cuando vi el vídeo del Primer Teniente de Alcalde de San Fulgencio...
    Lo subí a mi blog y allí queda como testimonio de lo que realmente pensamos acerca de los representantes de la Patria.


    Yo quiero ser concejala
    o concejal, da lo mismo.
    o Director-General,
    o Directora , o ministro,
    o ministra, o asesora,
    o asesor de Urbanismo.

    Yo quiero tener un cargo,
    si puede ser, un carguito
    que no deje mucha “estela”
    para llenarme el bolsillo
    sin que nadie se dé cuenta…

    Y en un plis- plas, con un vino,
    mientras comemos centollas,
    cerrar un trato muy fino
    con un par de coleguillas
    de la mafia de Don Vito.

    Yo quiero ser el Padrino
    o la Padrina, da igual,
    que para firmar permisos
    las distinciones sexistas
    no se miran, que al robar
    somos hermanos y hermanas
    de una Santa Hermandad
    llamada la de “El Partido”

    Unos, que sin estudiar,
    sin saber ni hacer la O
    con un canuto, o canuta,
    están en la Dirección
    de lo que sea , da igual,
    forrándose de millones
    de aquí a la eternidad…

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  14. Fatamorgana, y amigos de este equipo: creo que todos tenemos blogs, supongo, por lo que para acrecentar esa unión que promulgo, tendríamos que estar todos interconectados, de modo que cuando alguien entre en uno de ellos, pueda ver todos los demás que estamos en la misma onda, y llegar así a más gente.
    Ya sabéis el mío. http://inmacapo.scoom.com/

    Y por si a alguien le interesa, aquí os doy mi web profesional: www.instituto-pnl.com
    Ahi está también mi CV, etc.

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  15. Estoy de acuerdo Inma.

    http://www.theopinionopinion.com/

    A ver si conseguimos dar a conocer la FORTALEZA del poder que los ciudadanos tienen en sus manos. Con pequeñas cosas, piedrecitas, como tu las llamas, como la oposición activa ante cualquiera de las arbitrariedades a las que se nos somete, PODEMOS cambiar, sin violencia , el entramado podrido por un eficaz sistema de gestión de la cosa pública, transparente y respetuoso con la LIBERTAD.

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  16. Hola Inma
    ¿No cree usted que el empeño de implantar la perfección no ha hecho sino conducirnos al horror a lo largo de la historia? Nadie debería programarnos, ni siquiera para el paraíso, por el contrario deberían dejarnos decidir con la mayor libertad que nos fuese posible, dentro de los límites de nuestra condición.
    No comparto su fe en el mito del buen salvaje, creo que unas décadas de experimentación han sido suficientes para demostrar su error. Tampoco confío en el maniqueísmo que nos exculpa de los problemas que nos acucian (los ciudadanos somos seres intachables, y los poderosos aves rapaces impenitentes). Si, como bien dice, miramos con un mínimo de honestidad hacia dentro, no hay lugar para la autocomplacencia; ni a los 2, ni a los 80 años, y no sólo en Occidente.
    Admiro su afán por movilizar a las personas, eso que llamamos la sociedad civil; refleja la convicción profunda de que la responsabilidad de lo que nos ocurra nos atañe a todos. Pero esa responsabilidad tiene un efecto retroactivo, y por lo tanto, en lo que nos pasa ahora también tenemos algo que ver.
    No entiendo la indignación irracional, aunque comprensible, hacia unos políticos que, al fin y al cabo, sólo se comportan como humanos, como no encuentro lógico el asombro colectivo ante la contemplación de lo peor de nuestro ser. Limitarse a esos sentimientos no es muy útil para identificar los motivos profundos de lo que pasa, y, por lo tanto, no va a ayudar gran cosa a solucionar nada.
    Una actitud positiva no debería consistir en negar los puntos débiles, sino más bien en conocerlos, intentar solucionarlos y diseñar medidas que atenúen o erradiquen sus efectos. Desgraciadamente hemos caído en un activismo que ha neutralizado todos esos recursos racionales.
    El problema de España no son los políticos, sino el sistema en el que se mueven, que permite la corrupción y la impunidad. Las personas no son peores aquí que en EEUU, la diferencia es que aquel país dispone de unos resortes legales que contemplan las debilidades del gobernante, las vigilan y las castigan, mientras que aquí todos nos echamos las manos a la cabeza ante la corrupción y el abuso, sin que el sistema nos proteja de ello. Ahora podemos levantarnos indignados y pedir más honradez en quienes nos dirigen, pero me parece a mí que nos traería mucho más a cuenta pedir una reforma de la constitución que incluyese una verdadera división del poder, y una ley electoral que permitiese la representación de los ciudadanos y no de los partidos. Fiarlo todo a la buena voluntad de los gobernantes que aún no han nacido no es una verdadera solución, tan sólo más de lo mismo. Pero esta es sólo una opinión, claro.
    Un saludo

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  17. Señor Benegas, parcialmente tiene usted razon, pero no todo es tan simple, los paises con mejor nivel de desarrollo de Europa son los paises nordicos y curiosamente en ellos hay poca poblacion y control a la inmigracion aun promoviendola por su escasa poblacion autoctona.

    Me molesta que se ponga como modelo ideal a EE UU cuando precisamente el modelo estadounidense es de todo menos respetuoso y democratico con el resto del planeta.

    Sin duda en EE UU hay mayor trasparencia politica y tienen una justicia mas coherente, pero eso no quita para que sea una sociedad con muchisimos porblemas, que de paso, imponen al resto del mundo.

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  18. Inma, para ser usted asesora de empresas, vaya como se la colaron los de Afinsa Forum...
    No se lo tome a mal, pero no quisiera que me asesorara.

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