lunes, 13 de febrero de 2012

Yo desconfío, tú desconfías, él desconfía

Javier Benegas [en Vozpopuli.com]
No hace mucho, en un despacho de un elegante barrio madrileño, dos hombres entrados en años, a la sazón vecinos y conocidos de un pueblo manchego, comparecían ante un notario para formalizar la escritura de compraventa de un pequeño terreno. Momentos antes de firmar, uno de ellos levantó la mirada del papel y casi pensando en voz alta dijo: “Hay que ver cómo han cambiado las cosas, Francisco. Antes habría bastado con que tú y yo nos diéramos un apretón de manos. Y hoy, para que nuestra palabra tenga valor, hemos de juntarnos con un extraño”. Incapaz de entender el reproche, el notario, bastante más joven que ellos, arqueó las cejas e, impaciente, se limitó a mirar su reloj.

Sirva esta anécdota real como la vida misma para poner de relieve, si se prefiere de forma un tanto exagerada, cómo, en el transcurso de unas pocas décadas, una burocracia infernal y una tropa de “personajes extraños” ha pasado a interponerse entre los ciudadanos y sus decisiones.

Y los burócratas le pusieron puertas al campo 

En cuestión de unas pocas décadas, el Estado y sus prolíficas administraciones no sólo se han convertido en el convidado de piedra de nuestras azarosas vidas, el gorrón que todos los días se sienta a comer a nuestra mesa, sino que también nos amedrentan mediante un bombardeo incesante de advertencias, convirtiendo, si es preciso, cualquier actividad cotidiana en una potencial amenaza.

"Para el legislador, poco importa si el entorno es físico o virtual: todo es susceptible de ser regulado"

A los ojos de estos burócratas, que se llaman inmerecidamente a sí mismos políticos, cosas habituales como conducir o comer se han vuelto casi de la noche al día en extraordinariamente peligrosas. Y sus consejos paternalistas han dado paso a un control creciente mediante el que – ¿no será esto lo que de verdad importa? – vacían nuestros bolsillos. Incluso Internet, antaño red prodigiosa de la relación y el acceso al conocimiento, es presentada como un nido de piratas, pederastas, estafadores y psicópatas. Paso previo a su toma de control por los burócratas.

Para el legislador, poco importa si el entorno es físico o virtual: todo es susceptible de ser regulado. De hecho, a cuenta del “peligro ecológico”, se le ha puesto, literalmente, puertas al campo. Y alambradas con pinchos.

España como una jaula de grillos

Ahora, con la crisis económica, esa mayoría laboriosa y ajena al activismo – la mayoría silenciosa – se va dando cuenta de que, además de ser pobres, no controlan sus vidas. Pero aún no terminan de asociar el efecto con la causa. Y, en consecuencia, el problema más grave no es que haya aumentado de manera exponencial el recelo hacia la clase dirigente, sino que la desconfianza se propaga imparable, de arriba abajo, y corrompe los círculos más íntimos de las personas. Para colmo de males, en este río revuelto pescan los vendedores de conspiraciones, una suerte de iluminados que van desde los que creen que todos los males tienen un único origen, como los atentados de Atocha, pasando por aquellos que están convencidos de que un puñado de banqueros puede gobernar el mundo, hasta llegar a quienes apuestan por sublevarse e instaurar un nuevo orden, en apariencia más democrático pero cuyo fin es la vuelta al totalitarismo.

"El ciudadano sabe qué es lo que en el fondo no funciona, pero está atado de pies y manos e infectado de ideas absurdas"

España es como una jaula de grillos, en la que cada cual tiene una brújula que señala un Norte distinto. El ciudadano medio recibe todos los días un sinfín de estímulos negativos frente a los que sólo encuentra ideas reduccionistas que simplifican los problemas de manera tramposa para así poder ofrecerle soluciones equivocadas. Todo lo cual, sumado a que la individualidad ha sido sacrificada en favor del formalismo burocrático, hace que lo irracional primer sobre lo racional. El ciudadano sabe qué es lo que en el fondo no funciona, pero está atado de pies y manos e infectado de ideas absurdas. Y, por lo tanto, no encuentra la solución o, en su defecto, no puede apoyar las ideas que debería. Y la frustración le lleva de vuelta al principio: tener que delegar en extraños.

En España, el despropósito ha llegado a tal extremo que ya flota en el ambiente un cierto aroma a neurosis colectiva. Y esta es la peor noticia de todas. Porque cuando la sociedad se desquicia, el individuo, en la parte que le toca, deja de confiar en sí mismo. Y si algo podemos dar por cierto es que sin confianza no hay crisis que se resuelva.


• Accede al artículo original y compártelo

_________________________________________________________

Suscribirte a La Tercera Ola
Correo electrónico:
Consultar este grupo

11 comentarios:

  1. Asi que cualquiera que crea que hay una elite que gobierna el mundo es un iluminado conspiranoico, y díganme, ¿quien tiene la culpa de lo de Grecia? ¿los politicos españoles? ¿Y de lo de Italia? ¿Y de lo de Irlanda? ¿Y de lo de Europa en general? ¿Son ustedes tan ilusos que se creen que esta reforma laboral está hecha por el PP y no viene de fuera, de por ejemplo el FMI? No son conspiranoias, las conspiranoias son las que nos inoculan los medios de comunicación.

    Salu2

    ResponderEliminar
  2. La situación es alarmante, mi opinión sobre este desastre es Alemania, Europa no tiene mucho recorrido sin una unificación , una única bandera, idioma y leyes, esta unificación solo sería posible en un hipotético escenario bélico a escala mundial y por supuesto que Dios no lo quiera nunca., el sistema esta inflamado de todo tipo de regulaciones con la finalidad de crear puestos políticos que requieren de capital humano e infraestructuras creando un gasto insostenible y un control sobre los ciudadanos insoportable, estado es la supervivencia del sector político contra más gigante más políticos y sus empresas los partidos más poder sobre las personas una multitirania en resumidas cuentas, la reflexión es la siguiente es necesario esta locura de autonomías ,comarcas, mancocumunidades y toda este disparate para crear más casta parásita , el ciudadano ya no puede más, al final será un conflicto entre el sector político auténticos tiranos

    ResponderEliminar
  3. Llegará el día que la gente piense por ella misma y se dé cuenta de la realidad más próxima...
    Cuando se pierda el MIEDO que nos paraliza, cuando se intente cambiar los vicios del SISTEMA, cuando cambiemos de líderes, cuando eliminemos leyes diseñadas en otros tiempos para otros contextos...

    Hay que destruir el sistema para hacer otro sistema que los de arriba vean peligrar su estatus...
    Romper esquemas para crear nuevos esquemas, pensar diferente para hacer cosas diferentes.

    ResponderEliminar
  4. Sr. Benegas: su artículo,lúcido, por lo tanto, nada que añadir. Felicidades.Con todo,aprovecho este sección para desear que se abra una brecha entre el individuo y la desconfianza que Vd. señala. Y una buena noticia en este sentido sería la percepción de que, con el relevo de Gobierno, se va reduciendo el intervencionismo de Estado.
    El individuo (yo mismo, sin ir más lejos) estaría expectante si percibiera que el PP no solo gestiona mejor los recursos públicos sino que hace justicia al Gobierno saliente del PSOE. Justicia contable, por ejemplo, lo que es tanto como decir que todo lo que el Gobierno PSOE ha avalado con deuda queda en suspenso. Justicia penal que pasa por acusar a los responsables del déficit de Estado por encima del 3%. Justicia histórica que podría servir para cotejar el Gobierno con los méritos y capacidades, descontada la tantísima burla de todo lo que ha estado meneando el culo y la cartera con cargo en los ministerios. Justicia lingüística que pasa por poner las declaraciones socialistas frente al espejo de sus latiguillos y sus respuestas estereotipo. Justicia...,etc...
    El otro modo de actuar, el relevo, la alternancia de Gobierno, ya lo ha visto el individuo, y es decepcionante que los que gestionan mejor, sean, con todo, parte del problema.
    Ánimo porque donde quiera que una entidad semejante al individuo cristaliza, el decorado humano de los congresos de partido político se parece a las legiones de nulidades rumoreantes de los relatos de ficción.
    Apóstrofe 1

    ResponderEliminar
  5. Lo de "un nuevo orden cuyo fin último es la vuelta al totalitarismo" me duele en el alma....
    ¿Hemos llegado, como dice el propio artículo, a ese grado de desconfianza en el que ya no se puede ni creer en la mejora de la aplicación de la Democracia...?
    Si es así, que nos den... perdón, que nos sigan dando y no paren.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sospecho que el autor se refiere a los movimientos asamblearios que terminaron por apoderarse del 15M. No a otros regeneracionistas y que apuestan por una democracia de calidad.

      Eliminar
  6. "España es como una jaula de grillos". "No encuentra la solución o, en su defecto, no puede apoyar las ideas que debería. Y la frustración le lleva de vuelta al principio: tener que delegar en extraños"
    Pues claro, el paso previo al totalitarismo es la destrucción del espacio público común en la que los humanos pueden actuar. De esta manera quedan separados unos de otros. La legislación se hace entonces imprescindible para regular la convivencia.
    Carecemos de espacio para poder influir en el destino de nuestro país y en definitiva en nuestro propio destino y en el del mundo que vamos a dejar a nuestros hijos, porque unos profesionales se lo reservan por entero. Por eso tenemos que delegar en otros decisiones tan privadas como las que corresponden a nuestras relaciones familiares.
    Sin embargo no puede decirse que seamos inocentes, porque hemos vivido tan bien estos años atrás, sin preocuparnos nada más que por el pan y el circo. Quién nos iba a decir que un día echaríamos de menos la responsabilidad... ¿o tal vez no es eso lo que en realidad echamos de menos?

    ResponderEliminar
  7. La ola

    http://www.youtube.com/watch?v=azjctIF8xV4

    ResponderEliminar
  8. ¿Es de conspiranoicos deducir que todo lo que ha estado pasando en España tiene su origen en el 11M? ¿Vd. podría afirmar como única y valida la teoria oficial de los atentados? ¿Es logico el desmantelamiento de toda la estructura economica del pais desde la entrada del psoe y la creacion de una deuda monstruosa? Deuda con sus respectivos intereses que nos ha empobrecido a la mayoria y de los que alguien, unos pocos, han salido beneficiados y se han hecho escandalosamente ricos. ¿Es esto conspiraoia o la constatación de una realidad?

    Yo desconfío y desconfío tambien de Vds. porque sobre del 11M no habría que descartar ninguna hipótesis ya que la oficial se ha demostrado como falsa y la menos verosimil.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, creer que todos los males son fruto de un sólo hecho es típico no sólo de conspiaranoicos sino de neuróticos irracionales

      Eliminar
    2. La intolerancia, descalificación y el insulto ante las opiniones ajenas clarifica a algunas personas de este foro y además, el moderador lo tolera, lo cual confirma mis apreciaciones.
      Sí, desconfio de vds. y de sus planteamientos.
      Es mi primera y última intervención.

      Eliminar

Esta web busca la colaboración de todos quienes accedan a ella. Por lo tanto, se habilita la posibilidad de añadir comentarios al pie de los post. Rogamos a todos el buen uso de esta utilidad. Los comentarios ofensivos, vejatorios, que contengan insultos, falsas acusaciones o que sean manifiestamente ofensivos, no serán publicados. Gracias por vuestra colaboración.