lunes, 23 de enero de 2012

¡Es la clase media, idiotas!

Javier Benegas [en Vozpopuli.com]
Desde que empezó la crisis, la tensión entre las agencias calificadoras de riesgo y la clase política europea ha ido en aumento. Y los gobiernos de muchos países del viejo continente se han aplicado con denuedo a la tarea de socavar la reputación de estas empresas, alegando que, en el pasado, se equivocaron al no advertir los riesgos económicos que desembocaron en el crash financiero de 2007, y que, ahora, cometen un nuevo error al exagerar el riesgo de solvencia de muchos estados europeos.

En este argumento se reproduce el habitual esquema con el que se generan las falacias en política: partir de una gran verdad para terminar en una miserable mentira. Porque si bien es cierto que las agencias de calificación pecaron de exceso de confianza antes de 2007 y, después, se han vuelto intransigentes, insinuar que ello es producto de una conspiración pone de relieve hasta qué punto los máximos mandatarios europeos han perdido los papeles. El actual “exceso de celo” de estas agencias no obedece a ningún oscuro designio sino al lógico movimiento pendular – es decir, ir de un extremo al otro – de quien, una vez escaldado, decide pecar por exceso y no por defecto. A todas luces, la cólera de los políticos europeos no sólo no está justificada sino que es una impostura. El recurso a la teoría conspirativa – enésima vez que se incurre en ello desde que empezó la crisis – es una maniobra de distracción con la que desviar el foco de atención de los ciudadanos hacia presuntos enemigos externos.

Desgraciadamente para todos nosotros, los argumentos que esgrimen estos conspiradores son ciertos. Y más allá de los desesperados intentos de consolidación fiscal, la reestructuración financiera sigue en el aire y aún no ha habido reformas estructurales que merezcan tal calificativo. Ya han transcurrido 5 años desde que comenzó la crisis. Un lustro, que se dice pronto. Tiempo más que suficiente para que, de haberse hecho lo importante, estuviéramos a estas alturas recogiendo los primeros frutos. Sin embargo, lejos de eso, seguimos cosechando tempestades.

La crisis que había detrás de la crisis

Con su actitud, los políticos europeos parecen tratar de ocultar que esta crisis no es cosa de un día sino que ha estado macerándose bastante tiempo. El crash financiero de 2007, lejos de ser el origen de esta pesadilla – más bien es una de sus consecuencias –, lo que hizo fue aflorar, en toda su dimensión, los graves problemas que llevaban años gestándose.

Para Europa, las cosas empezaron a marchar mal en el mismo momento en que su clase media dejó de crecer y empezó a menguar. Este cambio de tendencia fue exacerbado precisamente por los políticos, que, al emplearse a fondo y aplicar medidas cada vez más intrusivas y equivocadas, agravaron los problemas que pretendían resolver. En este sentido, cabe destacar el abaratamiento del precio del dinero (socialización del crédito) y la imparable expansión de las administraciones públicas, su labor de desincentivación y su pujante papel como prestadoras de bienes y servicios en competencia desleal y directa con el sector privado. Todo ello hizo que, de forma lenta pero segura, la clase media retrocediera sobre sus pasos. Y cuando la tasa anual de variación positiva de la renta disponible de los ciudadanos en general, y de la clase media en particular, empezó a desplomarse (en España ya en 2004 se estimaba que la renta familiar de la mitad de los españoles se situaba por debajo de los 11.000 euros), se recurrió a estimular el consumo y el endeudamiento propagando una engañosa sensación de riqueza y, también, de seguridad, al amparo de una costosa red llamada Estado de bienestar que los políticos habían ido tejiendo alrededor de los ciudadanos. Era sólo una cuestión de tiempo que la diferencia entre la riqueza real y la riqueza aparente terminara por rebasar todas las líneas rojas, y que la tensión entre ambas hiciera saltar por los aires la ilusión colectiva de habitar un mundo feliz.

"Durante mucho tiempo, el progreso económico de Europa, y también el de España, ha estado íntimamente ligado al surgimiento y proliferación de la clase media. Y es lógico deducir que su desaparición definitiva supondría el fin de cualquier posibilidad de prosperidad futura"

En España, ya en 2005 la tasa de pobreza y riesgo de exclusión social para los ciudadanos comprendidos entre los 16 y 61 años de edad (aquellos que están en edad de trabajar; es decir, los más productivos) se situaba en el 21,1%. Sin embargo, el modelo no se cambió, de tal forma que en 2011 esa cifra había ascendido al 27% y sigue aumentando de forma imparable. Desde los años 80 del siglo XX hasta hoy, la proporción de población que pertenece a la clase media no ha dejado de disminuir (58% frente al 43% en 2009). En la actualidad, a falta de estadísticas que lo corroboren, es seguro que no alcance el 40% ya que, según el último Informe de Trabajo y Pensiones de la Agencia Tributaria, el 60% de los trabajadores españoles cobraba al mes 1.000 euros o menos. Estas estadísticas, y otras muchas, ponen en evidencia que nuestros problemas vienen de lejos. Los datos son incontestables, y demuestran que nuestra situación no es fruto de una conspiración sino el resultado de aplicar políticas equivocadas, fiadas a intereses particulares y a la compra del voto ciudadano. A pesar de todo, la clase política europea se resiste a romper con el pasado y persiste en el error, poniendo en grave riesgo no sólo la supervivencia del euro sino el futuro de cientos de millones de europeos.

Primero las personas, después los tecnócratas

Durante mucho tiempo, el progreso económico de Europa, y también el de España, ha estado íntimamente ligado al surgimiento y proliferación de la clase media. Y es lógico deducir que su desaparición definitiva supondría el fin de cualquier posibilidad de prosperidad futura. No es preciso ser muy brillante, basta con el mínimo sentido común, para entender que la clase media es parte vital de la economía de cualquier país desarrollado. Es la que genera la mayor parte de los trabajos productivos, pues no vive de las rentas del capital sino de su esfuerzo e iniciativa, y, también, es el principal pilar de los Estados como fuente de ingresos vía impuestos. Así pues, si la clase media, en vez de regenerarse y crecer, sigue extinguiéndose, será imposible volver al crecimiento estable y sostenido de nuestras economías. Pese a la evidencia, parece que los europeos hemos aceptado la pérdida de estatus como algo inevitable. Y de ningún modo podemos dar por bueno que esta tendencia hacia el empobrecimiento colectivo sea un proceso sin solución. No tiene por qué ser así y no debe ser así. ¿Cuántas cumbres necesitan los políticos europeos para darse cuenta que sanear el sistema financiero y reducir el endeudamiento de los estados, aún siendo condición necesaria, no servirá de nada si no se hacen las reformas capaces de despejar el camino y poner en marcha a la parte más pujante y productiva de nuestras sociedades? Hay cuestiones que, por obvias, no necesitan discusión. La única opción para salir de esta crisis es salvar a la clase media. Porque si a estas alturas hay alguna certidumbre, ésta es que sin clase media no hay solución.

Twitter: @BenegasJ


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8 comentarios:

  1. Sí, solo nos dedicamos a pagar impuestos, para sufragar los costes de los políticos, sindicatos, asociaciones de "empresarios", ciudadanos ilegales y un montón de parásitos que aparecen por todos los rincones.
    Vaya PAIS,

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  2. No te compliques la vida,esta crisis ha sido provocada,el bajo interés de los ahorros provocó que mucha gente prefiriera endeudarse era facíl pagar y por el ahorro no sacaban nada.El que actúo y paro esta forrado,el que siguio con el sistema esta arruinado.Los bancos reciben nuestro dinero y se lo prestan a los politicos y el pueblo paga intereses y amortización.Felipe Gonzalez se puso nervioso¿como ves al Sr Griñan?Se publican autenticas barbaridades y no pasa nada,se comprueban acuerdos extraños y no pasa nada.LAS LEYES SON SUYAS y nosotros no sabemos defendernos.Dicen publicamente ¿PORQUE NO TENEMOS DERECHO A ENDEUDARNOS? Han tomado unas posiciones que son suyas y no van a renunciar a ellas hablando.Ni derechas ni izquierdas,la ley natural,las costumbres y la razón.Pero los politicos tienen el B.O.E. y la fuerza para imponer su voluntad.LA CRISIS NO SE SOLUCIONA PORQUE A LOS QUE MANDAN NO LES INTERESA

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  3. RECORDAIS:(Guerra)a España no la va a reconocer ni la madre que la PARIO.Los politicos estan al servicio de los bancos y se llenan la boca diciendo:Los que mandan son los mercados.A ellos les va muy bien.Espero que legislen que van a cobrar el salario minimo interprofesional.Si es bueno para nosotros porque no para ellos.

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  4. Ésta crisis sí es el agravamiento de una crisis sistemica inicial agravada más todavia con muchos ataques de los banqueros especuladores financieros britanicos y norteamericanos de Reino Unido y Estados Unidos,para enriquecerse con las malas expectativas que lanzaban de la Eurozona a esas odiosas agencias britanico-norteamericanas de Calificacion de Rating,cuando Reino Unido y Estados Unidos están más cerca de la suspension de pagos,que España y Italia juntos.Y a Reino Unido y Estados Unidos,esas agencias no les atacan,porque esas agencias son los servidores de Reino Unido y Estados Unidos,por eso Estados Unidos prohibe a Megaupload descargar ilegalmente contenidos,pero Estados Unidos no prohibe a Standard Y Poors calificar la deuda de paises perifericos semi-intervenidos,como España.Porque Estados Unidos se lucra economicamente comprando deuda publica española,y Reino Unido tambien.

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  5. ES LA PARTITOCRACIA REPRESENTATIVA CORRUPTA, LISTILLOS!! SI NO SE ACABA CON ESTOS LOBBIES DE MAFIOSO POLITICO Y ECONOMICO, NADA SE PODRA RECONSTRUIR DE LA RUINA ZP, QUE AHORA PARECE LE SALIO UN IMITADOR EN RAJOY, ASI FATALMENTE LO FUI VATICINANDO... QUIZAS AUN PUEDA RECTIFICAR, DE VERDAD. NO DE MISERIA, ESTAFA SOCIAL Y MENTIRAS DE TESTAFERROS DE MASONES Y CAPITALISTOS DEGENERADOS SIN ESCRUPULOS NI ETICA.

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  6. No hay solución, salvese quien pueda. Mejor salir de aqui corriendo antes de que sea demasiado tarde...

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  7. Ya es demasiado tarde para salir corriendo
    ¿Salir a donde? ¿A Marruecos con patera?
    Hemos esperado 7 años confiando en Zapatero, Rubalcaba y Pajin, esperemos 3 meses a Rajoy aunque no confiemos en el.

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  8. es la clase media idiota?
    si esperamos algo razonable de la clase o casta que nos ha llevado a esta situacion ? somos idiotas
    si los votamos una y otra vez a cualquiera de las anteriores legislaturas? somos idiotas
    si aceptamos a los chorizos y especuladores con justicia? somos idiotas
    y ademas de esto encima esperamos que ellos mismos lo arreglen ?somos idiotas
    pero diria mas si por miedo a perder lo poco que nos queda ? somos idotas
    y quien actua piensa y calla como un idiota ademas de tener esperanzas de idiotas sin intencion alguna de enfrentarse a la solucion es irreparablementr
    i
    IDIOTA. con que solo cabe esperar la oportunodad de dejar de ser idiota o emigrar a otro lugar que no habiten tantos idotas

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